Ediciones Clío
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Autor: Jorge Villasmil Espinoza
Comentario: Dr. Gabriel Andrade
Ajman University, Emiratos Arabes Unidos
ORCID: https://orcid.org/0000-0001-8053-072X
Hasta 1992, los venezolanos orgullosamente proclamaban ser ciudadanos de una de las pocas democracias en América Latina. Mientras la mayoría de los jefes de Estado de nuestra región eran militares que habían llegado al poder a través de violentos pronunciamientos, los venezolanos tenían elecciones libres y transparentes. Eso, aunado a la prosperidad petrolera, hacía de Venezuela un país promisorio. En 2023, Venezuela es uno de los mayores exportadores de refugiados en el mundo. ¿Cómo explicar esa transformación tan repentina? Muchos autores han señalado lo obvio: la prosperidad y estabilidad que aparentemente prevalecía hasta 1992 no era del todo real.
Estuviera o no justificado el intento golpista del 4 de febrero, aquellos acontecimientos despertaron a los venezolanos de un sueño dogmático, y a partir de entonces se vieron en la necesidad de someter a examen crítico la historia de su nación durante el siglo XX.
Jorge Villasmil lleva a cabo esa labor en Liderazgo político y conformación del Estado democrático (1945-1999), (Ediciones Clío, 2023). Según explica, su labor historiográfica está motivada por “el afán de entender y explicar el rol desempeñado por el liderazgo
político de tipo democrático o, civil-democrático, en el período 1945-1999, al calor del cual surgió y se desarrolló dialécticamente una forma de Estado y de gobierno de carácter democrático y representativo” (pp.13-14).
Con gran capacidad analítica, el autor reseña los procesos históricos que perfilaron la democracia venezolana. Muy sensatamente, Villasmil enfoca su estudio “sin apologías ni criticas maniqueas la actuación histórica” (p. 100). Tras este recorrido, el lector se llevará la idea de que, aun con sus imperfecciones, los primeros cuarenta años de democracia venezolana
fueron valerosos, y que el camino hacia la mejora de la crisis actual, debe igualmente pasar por el sendero democrático. De igual manera, Villasmil explica muy razonablemente que “la idea de la democracia ha estado presente en el imaginario político nacional como la opción o alternativa más viable para conducir al país hacia el sendero de la modernidad y el desarrollo moral y material” (p.101). Pero, por supuesto, hay lecciones que aprender a partir de las imperfecciones de aquellos
años. Nos lo recuerda al afirmar que: “los errores cometidos por el liderazgo civil encabezado por AD en el trienio, junto al final dramático del sistema político forjado al calor del Pacto de Punto Fijo, deben servir como lección histórica, en el sentido de renunciar a, en oportunidades próximas, construir un sistema político donde prevalezca la exclusión de la sociedad civil organizada y de los diversos sectores sociales, políticos, económicos y culturales que inciden en la realidad nacional” (p.101).
Ante el escenario político actual, es comprensible que muchos sectores de la sociedad civil venezolana (y más aún, aquellos que han marchado al exilio) se sientan sobrecogidos por la desesperanza. Pero una lectura del libro revela que, así como la democracia fue una fuerza modernizante en la historia de Venezuela, también tiene el potencial para ser el marco a partir del cual se puede solventar la crisis actual. En ese sentido, tras su examen historiográfico, el autor concluye con una nota razonablemente optimista al afirmar que: “aunque el Estado centralizado de partidos fue superado, el nuevo Estado social de derecho y de Justicia, sigue enmarcado, desde el punto de vista formal y operativo en el contexto ideológico de la democracia, lo que evidencia que el liderazgo de la cultura política democrática llegó en Venezuela para quedarse” (p. 104). Como bien lo dijo Churchill en su momento, la democracia es el peor sistema de gobierno, excepto todos los demás. En Venezuela está observación sigue muy vigente.
“La historia… testigo de los tiempos, luz de la verdad, vida de la memoria, maestra de la vida, testigo de la antigüedad.” Ciceron (106 AC-43 AC)
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